Una alianza público-privada firmada por el Intrant, Santo Domingo Motors, Motor Crédito y Entrena, crea el programa “Juventud en tránsito”, que iniciará en su primera fase beneficiará a más de mil estudiantes de 8 planteles de La Guáyiga, en Pedro Brand, con una inversión de cerca de 5 millones de pesos.
Santo Domingo. RD. – En un esfuerzo conjunto por reducir los accidentes de tránsito y fomentar una cultura de responsabilidad vial, con el apoyo del Ministerio de Educación (Minerd), cuatro instituciones firmaron hoy un acuerdo para implementar el programa «Juventud en tránsito», que formará conductores y peatones responsables, reducirá accidentes y mejorará la movilidad.
Esta alianza público-privada, conformada por Santo Domingo Motors, Motor Crédito, Entrena y el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), beneficiará en su primera fase a más de mil estudiantes de ocho centros educativos en la comunidad La Guáyiga, Pedro Brand, con una inversión cercana a los cinco millones de pesos.
El acuerdo fue suscrito en un acto efectuado este martes, en la sede de Santo Domingo Motors, por su presidente, Aníbal Rodríguez; la presidenta de Motor Crédito, Benahuare Pichardo; el presidente de la empresa Entrena, John Siebel; y el director del Intrant, Milton Morrison.
También estuvieron presentes en el acto, el presidente del consejo de administración del Grupo Ambar, Miguel Barletta; la miembro de este consejo, Justine Anselin; y la directora comercial y posventa de Santo Domingo Motors, Marielly Figueroa; la directora de Entrena, Saschia Seibel, entre otros ejecutivos y funcionarios.
Un compromiso con la educación vial
El proyecto «Juventud en tránsito» se centrará en la educación vial integral, abarcando desde la concientización sobre la importancia de un comportamiento seguro hasta el conocimiento de las normativas de tránsito y el desarrollo de habilidades prácticas.
Se espera que los jóvenes participantes adquieran valores, hábitos y actitudes que les permitan tomar decisiones responsables en el tránsito, ya sea como peatones, ciclistas, pasajeros o futuros conductores.
Impacto a largo plazo
Esta iniciativa tiene el potencial de generar un impacto social significativo al reducir accidentes de tránsito y sus consecuencias, se espera un cambio de cultura vial hacia una mayor seguridad y respeto, el desarrollo de ciudadanos más conscientes y responsables, y un impacto económico positivo al disminuir los costos asociados con los accidentes.
Además, se prevé una mejora en la movilidad urbana, la promoción de la salud pública (mediante la reducción de accidentes) y el fortalecimiento del tejido social.
Cada institución desempeñará un papel crucial en el éxito del programa, Santo Domingo Motors y Motor Crédito aportarán los recursos económicos, Entrena ejecutará el programa y las actividades formativas, el Minerd garantizará el acceso a los centros educativos y velará para que el contenido cumpla con los estándares educativos, y el Intrant supervisará el cumplimiento de las normativas de seguridad vial.
Alcance y formación
En su primera fase, el proyecto iniciará con mil estudiantes de al menos 8 centros educativos en la comunidad La Guáyiga, Pedro Brand, quienes recibirán 40 horas de formación teórica y práctica en temas como tránsito, peatones, agentes de tránsito, vehículos, factores de riesgo, seguridad vial, señales de tránsito, semáforos, ley de tránsito, conductores, infracciones y sanciones.
«Juventud en tránsito» representa una inversión en el futuro de la República Dominicana, al educar a los jóvenes sobre seguridad vial, se construye una sociedad más segura y responsable, la reducción de accidentes no solo salvará vidas, sino que también tendrá un impacto positivo en la economía, la salud y la calidad de vida.
Este acuerdo es un ejemplo de cómo la colaboración público-privada puede generar soluciones a problemas sociales, se espera que «Juventud en tránsito» inspire otras iniciativas y contribuya a crear un futuro más seguro en las vías dominicanas.
La firma de este acuerdo marca el inicio de un camino hacia una cultura vial más responsable, donde los jóvenes sean agentes de cambio.